Cada vez son más el número de carreras que se desarrollan por el medio natural, con lo que la repercusión, impacto y vulnerabilidad de dicho medio también ha aumentado.
Aunque poco a poco vamos concienciándonos de la conservación del medio en el que desarrollamos nuestra actividad y debido a esto, en los últimos años son multitud las carreras que por diferentes motivos han optado por suprimir los vasos de plástico de sus avituallamientos.
¿Cuáles son los motivos?
Pueden venir impuestos desde las administraciones pertinentes encargadas de conceder los permisos necesarios para el desarrollo de las pruebas deportivas. Según la catalogación de figura de espacio protegido por la que discurra una carrera, los gestores de dicho espacio van a ser más o menos permisivos en cuanto a zonas de transito, utilización de vehículos a motor y no van a ser menos respecto a la producción de residuos. Por lo que no es de extrañar que desde la propia dirección de Parques Nacionales, Naturales u otros tipos de espacios protegidos recogidos bien por la legislación española o por la internacional, que sean ellos mismos quienes directamente prohíban el uso de vasos en eventos que discurran por zonas de mayor fragilidad ambiental.
Otro motivo puede ser por problemas de logística debido a la difícil accesibilidad a determinados puntos del recorrido en los que hay que portear todo el material a la espalda por terrenos de alta montaña, a los que se suma que en condiciones meteorológicas adversas y vientos en altura haga que todo salga volando quedándose desperdigado por innumerables lugares.
Hay que tener en cuenta que todos estos problemas logísticos se ven incrementados en mayor medida en función de la distancia de las pruebas, siendo mucho más relevantes en carreras de ultradistancia, donde las zonas a cubrir son más numerosas, por lo que en muchas de ellas se opta por que la prueba se desarrolle en semiautosuficiencia. Además, en este tipo de pruebas, también se obliga a llevar un vaso personal además de otros contenedores para transportar los líquidos ya que en muchos avituallamientos se abastece con sopas u otros líquidos calientes que, si echásemos directamente a nuestros bidones nos sería complicado el poder ingerirlos al mismo tiempo que dejarían cierto sabor y olores en ellos, pudiendo llegar a ser incómodos a la hora de beber agua con restos de comida.
Otra de las razones de esta medida puede venir condicionada por la preocupación de la organización en reducir el impacto medioambiental, evitando de esta manera un derroche innecesario de vasos al mismo tiempo que se reduce de manera notable los residuos generados durante la carrera, sin hablar del ahorro económico que esto produce pudiendo destinarlo a otros servicios para los corredores.
En los últimos meses, debido a la crisis social y sanitaria derivada de la COVID-19, muchos organizadores de carreras han tenido que suspender o aplazar sus pruebas. Mientras que quienes han decidido mantener sus fechas de realización, ya están trabajando en protocolos con los que garantizar las medidas higiénico-sanitarias para evitar contagios y repuntes del virus. Además de las medidas recomendadas por los organismos oficiales, tales como uso de mascarilla y guantes o guardar las distancias de seguridad interpersonal, en nuestro ámbito es una razón de peso la eliminación de vasos de plástico y su remplazo por el uso de vasos plegables personales por parte de los participantes para evitar posibles contagios ya que, sin duda, son un foco de contagio importante. Por eso, cuanto menos tiempo y menos cosas agenas toquemos en los avituallamientos estaremos reduciendo nuestra exposición a posibles focos de contagio.
¿Cómo conseguirlo?
Por alguno de los motivos citados o por todos ellos nos encontramos con que en muchos reglamentos actuales, los organizadores han optado por eliminar los vasos en los avituallamientos obligando a los corredores a llevar durante las carreras vasos propios o cualquier otro recipiente con el que poder beber durante el transcurso de la prueba, como pueden ser botellines, soft flasks e incluso bolsas de agua.
Como todos sabemos, muchas veces no se leen ni se miran los reglamentos de las carreras ni la información de última hora en la web o redes sociales y, para evitar que los corredores que se enteran a última hora de la supresión de los vasos en los avituallamientos en la carrera en la que van a participar, los organizadores han optado por añadir en los obsequios de la bolsa de corredor vasos plegables con los que poder beber durante la carrera.
Mientras que por otro lado, vemos que cada vez es mayor la cantidad de personas que acuden a las carreras teniendo estas distintos niveles y objetivos, por lo que es muy habitual ver que, independientemente de la distancia de la carrera, la gente vaya con mochilas o riñoneras con diferentes tipos de recipientes con los que poder beber durante el transcurso de la carrera y/o en los avituallamientos.
¿Qué se pretende con estas medidas?
El principal objetivo de la implantación de esta medida por parte de los organizadores de las carreras no es el ahorro económico que puede derivar de ello, ni que venga exigido por las administraciones a la hora de solicitar los permisos, sino que, es sobre todo como medida de conservación de un medio tan frágil como es el medio natural en el que desarrollamos nuestra actividad.
Se trata en definitiva, de concienciar a los participantes y también a sus acompañantes de que somos nosotros quienes tienen que ocuparse de la conservación y del cuidado del medio natural, reduciendo nuestro impacto en la medida de lo posible para poder seguir disfrutando de Montañas limpias durante muchos más años.
No se toma esta medida con la intención de dar un menor servicio a los corredores en las zonas de avituallamientos, sino que se pretende que disfruten de un medio mucho más limpio y menos deteriorado por la mano del hombre, con una medida tan sencilla que ha costado tanto tiempo ponerla en práctica.
Además, debido a la situación que estamos viviendo los últimos meses debido a la pandemia del COVID-19, ya no solo por parte de los organizadores sino también por parte de los participantes, e independientemente de su obligatoriedad o no en las pruebas, el uso de vasos personales y reutilizables no solamente van a reducir un impacto ambiental, si no que vamos a estar contribuyendo a evitar posibles contagios y ampliando tanto nuestra seguridad propia como la del resto de participantes y de los miembros de la organización.
Desde el punto de vista de los corredores, no estamos simplemente ayudando a que no se generen tantos residuos, sino que también, estamos ayudando a los organizadores a que el entorno por el que discurren las carreras queden completamente limpios y tengan mayores facilidades a la hora de solicitar los permisos y podamos seguir disfrutando de las carreras por montaña.
